jueves, 15 de octubre de 2009

Carta a Una Amiga

Desde aquel día en que te conocí sabia que eras diferente, aquellos días no sabia hasta que punto, pero hoy que te conozco me doy cuenta de la realidad que abarca aquella sensación que tuve. Hoy en día sé lo especial que eres y puedo apreciarte por ello. Eres especial para mí, pues en ti encontré a esa persona en la cual puedo confiar despreocupadamente; encontré a alguien que me quiere por lo que soy, y no por lo que tengo; en ti vi a esa amiga, a la cual puedo llamar hermana; en ti vi a esa persona que me acepto con mis errores, pero que no dejo que me perdiera en los mismos... En fin, alguien que ha hecho que mi estancia en este mundo cruel sea mas placentera...

Es inevitable que me invada el miedo de perderte (pues cuando uno quiere a alguien lo menos que desea es perderlo), pero sé, que aun en la distancia, tu esencia sera tan fuerte que quedara perenne en mi alma, hasta el punto que sentiré que aun me sonríes , como lo hacías, en aquellos días en los que tú, conmigo compartías....

Tu, única como Dios te creo, has sido la razón por la cual quiero vivir, tu me inspiras confianza, la necesaria para poder seguir adelante. Eres uno de mis modelos a seguir, pues con tu fuerza, voluntad y firmeza te has vuelto una persona digna de admirar. Te admiro y sin miedo te lo digo, no me daría vergüenza que todo el mundo lo sepa.

Por eso y muchas cosas no tengo miedo de decirte:: Te Amo!

Dios sabe lo que hace, y por alguna razón quiere que seamos amigos...

Mis Mejores Deseos Para ti... Que el Señor Dios te colme de bendiciones!!

HE VUELTO A EMPEZAR



Abrí mis ojos,

Al fin pude ver aquello que me era irreconocible,
Me he decidido a volver a mí.

He vuelto a reconocer lo que me rodea.

He vuelto del pasado a mi presente.

He vuelto a darme cuenta que no puedo seguir hundida en el ayer,
Que mi futuro depende de lo que haga ahora.

He vuelto a fijarme mejor en lo que tengo.

He vuelto a apreciar aquellos que dormían en mí y hoy cobran vida de nuevo.

He vuelto a darme cuenta que no debo dedicar mi tiempo en cosas que no aprovechan.

He vuelto a notar que el éxito material no es la meta más importante en mi vida.

He vuelto a sentir la luz de un amor sincero que disipa la oscuridad.

He vuelto a saber que no hay ser humano que tenga derecho a convertir mi vida en sombra.
He vuelto a distinguir que los que logran el éxito hacen cosas que a los que fracasan les da miedo intentar.

He vuelto a ver mis problemas como un desafío, el cual me hace mejor.

He vuelto a notar que mi existencia sin DIOS es como una acción sin sentido, como un cofre vacío, sin tesoro alguno.

He vuelto a experimentar una nueva yo.

He vuelto a reconocer que el daño que alguien me pudo haber causado, no debe cambiar mis sentimientos ni mi manera de ser.

He vuelto a creer en mí.


He vuelto a empezar…